Argentina (Diario Opinión).- Dos nuevos sitios arqueológico en las poblaciones de los parajes Tres Pozos y Media Luna se acaban de sumar al que 7 años atrás se dio en la comunidad de El Quebracho. Con fuerte involucramiento de jóvenes estudiantes de la zona, en ambos lugares en principio se descubrieron y recogieron desde restos óseos humanos, cerámicas con tallados y piedras volcánicas.

La directora de Patrimonio Socio Cultural, Graciela Buiatti, y Diego Páez, profesor de Historia en la Escuela Agrotécnica 10 de El Quebracho, recordaron que todo se activó junto al proceso para construir el edificio de la Escuela Agrotécnica, donde se comenzaron a excavar las fosas para los cimientos de la obra y se hallaron el 16 de agosto de 2011 restos humanos y hachas de piedra, entre otros implementos. Se detuvo la obra y se dispuso su ejecución en otro sitio, a fin de conservar el lugar del hallazgo y profundizar el estudio arqueológico.
Científicos, arqueólogos, biólogos, tesistas y antropólogos provenientes de la Universidad de La Plata y un representante de la Universidad de Ciencias Naturales de Santiago del Estero se encargaron de hacer todo el estudio científico a partir del rescate de todos los restos que quedaron expuestos.
Una primera excavación se hizo en el 2011 y la segunda en el 2014. Se extrajeron los restos de 14 individuos (hombres, mujeres y niños con la particularidad de la cabeza colocada entre las piernas, semejante a una posición fetal), y entre las hachas de piedra halladas se determinó que era basalto de origen volcánico, una roca que no se encuentra en nuestro territorio. En algunos de los casos se encontraron acompañados de ajuar funerario que se estima caracteriza a los de mayor jerarquía.
Se trata del hallazgo más antiguo de actividad humana de la región Chaqueña-Central, pero una de las dudas aún de nuestros días es con qué grupo de nuestra región están emparentados. Incluso existe la posibilidad de que no tengan vínculo con los grupos que actualmente habitan la zona.
“Estos humanos caminaron nuestras tierras 300 años después de Cristo, de acuerdo a las pruebas de Carbono-14, o sea poco más de 1.700 años, y el tipo de enterramiento es muy diferente a los hallados en el Noreste argentino, lo que intereso a la comunidad científica que se vio envuelta en muchos interrogantes”, dijo Páez.
El profesor indicó además que “desde un principio la población del lugar se intereso muchísimo, estuvieron siguiendo con mucha vigilancia las excavaciones y para todos fue muy sorprendente; el mismo equipo científico se sorprendió porque están acostumbrados a trabajar en lugares aislados, y acá lo hicieron en medio de una comunidad y con los pobladores siguiendo a diario lo que hacían, fue una experiencia muy especial para ellos”.
Asimismo, destacó que los científicos hayan tenido “una actitud generosa al permitir que los alumnos participen de las tareas arqueológicas, inclusive explicaron a los caciques y lugareños a partir del creciente interés de todos ellos; es más, pidieron y así se hizo, que los restos hallados permanecieran en la comunidad y están a resguardo de la escuela agro técnica, aunque una de las hachas lo conserva uno de los caciques”.
Nuevos descubrimientos
Páez sostuvo también que desde ese momento la arqueología se transformó como una nueva actividad escolar y en toda la zona, y los motivo para seguir investigando: “En otros sitios cercanos, como Tres Pozos y Media Luna los chicos excavaron y hallaron cerámicas con distintos tipos de tallados. O sea nuevos descubrimientos por lo que se tomó contacto con los profesionales de La Plata quienes nos indican cómo conservar todo”.
En este sentido, explicó que “se trata de avanzar con trabajos de prospección arqueológica iniciada hace algunos años, o sea salimos a buscar yacimientos, una fase de exploración llegando a sitios donde teníamos pistas de alumnos acerca de lugares donde hay determinados fragmentos”.
Dijo además que “hay abundante material de cerámicas, como en Tres Pozos donde habita una familia criolla, encontramos además una piedra pulida y con evidencia de haber sido trabajada por el ser humano; en Media Luna además de cerámica hallamos restos óseos humanos”.
“Todo lo encontrado y asesorado por los arqueólogos estamos resguardándolos, a la espera de una nueva campaña que nos permita averiguar mas como la antigüedad del sitio que por indicios estimamos dataría de mil años”, indicó, y agregó que “lo concreto es que Formosa tendría dos sitios arqueológicos nuevos, resultado del trabajo que realizan los alumnos de nuestra escuela”
MUSEO
Páez indicó finalmente que la intención es que todo pueda mostrarse de una mejor manera, como en un museo arqueológico de sitio, donde la gente pueda observar no sólo lo que se encontró, sino ver la experiencia de cómo es el trabajo de un arqueólogo al observar un espacio arqueológico, “es decir, edificar una estructura que albergue el lugar donde se produjo el hallazgo, el cual debe mantener las condiciones de las excavaciones, por ejemplo”.